Internet of Things aplicado a la logística II
El IoT aplicado a la logística rastrea y protege los artículos
Los dispositivos hiperconectados también ayudan a evitar daños en los productos. Además, facilitan un control exhaustivo de los artículos almacenados.
- Control de temperatura. Existen sistemas capaces de monitorizar las condiciones de humedad y temperatura de los paquetes que se están transportando. De este modo es posible controlar si el pedido se encuentra en un estado de conservación óptimo o si por alguna razón no se está manteniendo en la temperatura ideal.
- Seguridad. El IoT también tiene aplicaciones para mejorar la prevención de robos o para evitar la destrucción de mercancías por parte de terceros. Algunos dispositivos permiten detectar cuándo y de qué manera se están manipulando los contenedores en los que se conservan los artículos.
- Evolución del envío. Es posible determinar dónde se encuentra cada uno de los artículos que transporta la flota de vehículos gracias al uso de esta tecnología. Tanto la propia industria como el cliente pueden comprobar en tiempo real dónde se encuentran sus artículos.
La hiperconectividad optimiza el transporte
Uno de los mayores retos que se ven obligados a superar los transportistas es la “última milla”. Se trata del último tramo que recorren los conductores y que suele posicionarse en suelo urbano. Por ello, el transporte se ralentiza en gran medida en el último momento. Sin embargo, el IoT aplicado a la logística ayuda a determinar cuál es el camino más rápido y menos transitado para llegar al destino y poder entregar el pedido.
- Rutas. Algunas herramientas IoT permiten obtener información para acortar las rutas y así ahorrar tiempo y combustible. Existen sensores capaces de detectar accidentes de tráfico en la lejanía o incluso atascos. No solo se aplica al transporte terrestre, sino que puede integrarse en barcos o aviones.
- Flota. La tecnología IoT revela la cantidad exacta de vehículos disponibles para ejecutar el transporte. Además, muestra en qué estado se encuentran: en marcha, detenidos, aparcados… También existen sensores que monitorizan las emisiones de CO2 para asegurar la sostenibilidad.
Las aplicaciones de los dispositivos IoT son casi infinitas. En el caso industrial interconectan mercancías, almacenes, sistemas, infraestructuras y vehículos, entre otros elementos. En conclusión, el IoT aplicado a la logística es el responsable de la digitalización de este ámbito profesional.
Si tratamos de hacer prospecciones de futuro, hay que tener en cuenta que actualmente solo el 1% de los objetos del mundo están conectados. Con estas cifras las posibilidades ya son amplias así que solo cabe imaginar cómo evolucionará esta tecnología en cuanto su uso se extienda por completo.